Los geohelmintos son parásitos intestinales que se transmiten al ser humano mediante la ingestión de huevos (Ascaris lumbricoides y Trichuris trichiura) o la penetración de larvas a través de la piel (uncinarias).
Una de cada cuatro personas a nivel mundial está infectada por al menos uno de estos parásitos, principalmente en zonas tropicales y subtropicales.